Educación
refuerza en los centros rurales la atención a los
inmigrantes
Duplica
la red de tutores de acogida y pone en marcha las clases de
español para extranjeros fuera del horario escolar. La DGA
editará material didáctico e informático para apoyar la
labor docente.
Lograr
la integración total del alumnado inmigrante recién
llegado es el objetivo de las acciones que pondrá en marcha
este curso el Departamento de Educación y Cultura del
Gobierno aragonés, que este año quiere reforzar
especialmente la atención a los niños extranjeros en el
medio rural.
Estas nuevas iniciativas se llevarán a
cabo gracias al convenio de colaboración entre el Gobierno
de Aragón y el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales
para el desarrollo de actuaciones de acogida e integración
de inmigrantes. Este acuerdo está dotado con más de 4,5
millones de euros.
Del dinero aportado por la DGA de sus
presupuestos de 2005 (1,07 millones), el Departamento de
Educación recibirá 509.849 euros, de los que la mitad se
distribuirán entre las comarcas para que potencien este
tipo de actividades.
Los más favorecidos por este convenio
serán los centros rurales, que pondrán en marcha medidas
de las que hasta ahora sólo habían disfrutado las
capitales. Tal es el caso de la puesta en funcinamiento de
las aulas de español para extranjeros fuera del horario
escolar en algunos institutos.
El año pasado se estrenó este
proyecto como experiencia piloto en el Centro Aragonés de
Recursos para la Educación Intercultural (CAREI), que se
encargará de supervisar las iniciativas que comiencen este
curso. El éxito de la iniciativa a impulsado a ampliarla a
otros centros de Secundaria.
Mediadores
bilingües
Estas
clases se imparten fuera del horario lectivo y son
voluntarias. Los centros dispondrán de mediadores bilingües
que, además de impartir las lecciones y realizar diferentes
actividades lúdicas, se encargan de hablar con los padres
para informarles sobre el proyecto. En el caso del CAREI, se
agrupó a los alumnos por países: chinos, árabes,
subsaharianos y del Este de Europa.
El programa se centra en los alumnos de
Secundaria porque son los que más dificultades muestran con
el idioma. La directora general de Política Educativa del
Gobierno aragonés, Carmen Martínez Urtasun, señaló que
en el caso de los niños pequeños su facilidad de adaptación
es muy grande.
Hasta ahora, en las comarcas, se habían
impartido clases de español pero dentro del horario
escolar, lo que obligaba a separar a los estudiantes del
resto de sus compañeros.
Pero ésta no es la única medida que
se fomentará este año. El Departamento incrementará de 30
a 62 el número de tutores de acogida que trabajará en los
institutos. Este profesor del centro, cuya figura se creó
el curso pasado, se encarga de recibir al nuevo alumno,
hablar con él y con sus padres y explicarles el
funcionamiento del centro. Además, intenta solucionar los
problemas que puedan surgir a lo largo del curso a través
de los medios de los que dispone Educación.
"Son un referente para los alumnos
inmigrantes en el centro; cuando quieren saber algo, se
dirigen a ellos", aseguró Martínez Urtasun, que
destacó los buenos resultados obtenidos el curso pasado por
estos tutores.
Ayuda
para los docentes
La
formación del profesorado para que brinde la correcta
atención a este tipo de alumnado es otra de las medidas que
se quieren impulsar desde el Departamento de Educación.
Por ello, se elaborará material didáctico
de español como lengua extranjera, ya que los métodos didácticos
no son los mismos que los que se abordan en una clase
normal. Además de publicar libros especializados, se crearán
programas informáticos que sirvan de apoyo tanto al
profesorado como al alumno.
La interculturalidad (conocer las
costumbres de otros países) será uno de los temas tratados
en esta documentación elaborada por el Departamento.
También, a través de las comarcas, se
brindarán ayudas para la incorporación tardía del
alumnado, para que cuando llegue a mitad de curso no se
sientan desplazados.
Por otra parte, se potenciará la
figura del mediador sociocultural, que cumple una función
fundamental en la integración del alumno, tanto en el
entorno escolar como en el social. Y es que muchas veces,
los problemas a los que se enfrentan estos escolares y sus
familias se deben a las dificultades de comunicación con
las personas que tienen a su alrededor y al desconocimiento
de las costumbres de la nueva sociedad a la que han llegado.
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